Producir S.P.C. : ¿para quién?
por ANDRES EGEA egeandres@yahoo.com.ar">
Tal vez el razonamiento más importante en estos días no es sólo preguntarse cómo se produce un producto SPC, sino principalmente a quien va destinado ese producto. Es decir: ¿Quién es el futuro comprador de mi producción?. Esto se ha convertido en la pregunta que cualquier empresario-productor debe hacerse para permanecer en el mercado de un mundo cada vez más cambiante que también se convierte en más inestable.
Esta nota, si bien tiene una visión desde el interior, espera despertar inquietudes en aquellos que participan activamente en esta cadena que se inicia en los haras y finaliza en las apuestas, retroalimentándose y que, lamentablemente, hoy ninguno de estos eslabones se encuentran en condiciones económicas favorables. Es decir que mejorando o arreglando alguno de esos eslabones o sectores que componen este negocio complejo, no puede pretenderse arreglar la totalidad del turf. Cada sector deberá participar y ceder algo para encontrar la solución en el mediano a largo plazo.
Seguidamente se intenta analizar una serie de variables (no todas) que se entienden son las principales que afectaron tanto a la demanda como a la oferta de caballos de carreras y las situaciones que se crearon.
El Pasado y el Estado Hípico comprador.
No hace muchos años se producía un SPC porque se disponía de los medios (campo, boxes padrillo, madres, etc.) y después se veía donde se los podía colocar, pero casi siempre se colocaban. Muchas pueden ser las razones de esa colocación: la inflación y los créditos, mayor poder económico de los potenciales compradores, mejores premios que aumentaban las expectativas del propietario inversor, etc.
Pero aceptemos que existía una política generalizada en casi todo el mundo, que era la intervención estatal que casi siempre lo hacía favoreciendo un sector a costa de las pérdidas de otro, sin que esto tuviera un sentido de equidad que es uno de sus objetivos prioritarios.
Al "Estado Hípico" muchos nunca le pagaron, a otros se les morían o desaparecían rápida y dudosamente los caballos y pocos pagaron como corresponde.
En ese período a un hipódromo del interior llegaban desde los remates de Buenos Aires alrededor de 100 productos. Estas compras se realizaban a través de un organismo estatal que se hacía responsable, pero luego cuando tenía que recuperar esos fondos surgían innumerables inconvenientes. Al "Estado Hípico" muchos nunca le pagaron y no se les exigía, a otros se les morían los productos rápida y dudosamente, otros debían un porcentaje de premios que decían nunca ganaron, etc. etc., y pocos pagaron como corresponde.
Entonces quién arriesgaba, ¿el particular que producía y asumía ese riesgo empresarial, el comprador que ve lo que compra y decide o la sociedad toda a través del Estado?.
En los últimos años en casi todo el mundo, como en el país, el rol del Estado ha cambiado radicalmente y nadie debe pensar que puede volver a participar en idénticas condiciones como comprador. Es un comprador que desapareció.
La producción : el enfoque de oferta:
En el enfoque de oferta se dice: "como tengo los medios para producir algo, lo hago y luego veré cómo y a cuánto lo vendo". Esto significa que no se tiene previamente en cuenta si ese producto tiene verdadera demanda en el mercado.
Otros SPC se producen en establecimientos cuya actividad principal son los cultivos agrícolas y la ganadería vacuna, por lo que "el haras" se convierte en un rubro subsidiado por esas actividades.
Asociado con lo anterior, este enfoque se veía favorecido por la presencia del "Estado comprador", más las otras causas ya descriptas.
Otro enfoque de oferta son los SPC que se producen en establecimientos cuya actividad principal son los cultivos agrícolas y la ganadería vacuna, por lo que "el haras" se convierte en un rubro que internamente se ve subsidiado por esas actividades. Pero la situación mundial de precios de los productos especialmente agrícolas, que disminuyeron en aproximadamente el 50% en los últimos tres años, hace que ese subsidio interno sea exageradamente caro para sus ingresos menguados y se replanteen las posibilidades de continuar produciendo SPC aún en condiciones de costos inferiores a los de un haras de aceptable nivel.
Es decir que en estos casos se tiende, con cierta racionalidad, a eliminar la actividad menos rentable y en la mayoría de los casos es el sector "producción de SPC".
Diferente generación empresarial.
De la generación de empresarios que decidieron hacer SPC a cualquier costo, algunos ya están cansados, otros ya se retiraron y los herederos no tienen la misma pasión que sus fundadores. Tal vez esto colaboró en la desaparición de varios haras prestigiosos en los últimos años.
Este hecho tiene dos lecturas encontradas: la primera dice que disminuye la oferta de productos lo que hace que se encarezcan los pocos que se ofrecen; y la otra considera que se retiran del mercado aquellos que no podían competir y esto
Tal vez esto colaboró en la desaparición de varios haras prestigiosos en los últimos años
beneficia a las empresas dedicadas exclusivamente a esta producción. Su calidad es superior y consecuentemente vale más su producto. En las nuevas generaciones este último concepto está más arraigado porque se puede lograr con la especialidad una mayor calidad competitiva.
El mercado ampliado del Sur.
El MERCOSUR parece ser una incógnita para la colocación de caballos de carreras desde Argentina. No se habla de ventas en igual forma y cantidad que otros productos argentinos ( electrodomésticos, trigo, harinas, frutas, etc..). Es por ello que nos podemos preguntar: ¿No hemos evolucionado en este tema frente a los demás países de la región? ¿No es mercado para el SPC argentino, por ejemplo el turfman brasileño?.
El MERCOSUR parece ser una incógnita para la colocación de caballos de carreras desde Argentina
¿Nos perjudica el tipo de cambio?. En el últimos años en Brasil la moneda se desvalorizó cerca de un 250%, ¿esto encareció nuestros productos?. ¿Los aranceles intra Mercosur perjudican a los SPC?. ¿Tienen todavía excesivo impuesto u otras trabas a la exportación a otros países?
Es un tema que es necesario esclarecer a través de especialistas.
Los premios.
En el interior
Sobre la situación de los Jockeys Clubs del interior es mucho lo que se puede opinar en función de: la desaparición de muchos de ellos, la situación critica de otros y de los pocos que quedan en condiciones financieras saludables.
Los premios fueron disminuyendo hasta desaparecer las carreras en muchos Jockeys Clubes. Algunos vendieron el hipódromo, otros abandonaron definitivamente la organización de carreras, algunos hacen dos o tres reuniones al año y en esta situación (desmejorada) siempre fue el propietario del SPC el que financió esta decadencia al recibir cada día menos premios, frente a costos que no bajaron significativamente.
En algunos casos se agrava para el propietario del interior cuando para correr se le exige a cada caballo valores para la inscripción, ratificación, remate obligatorio, etc., es decir también pone, de esta manera, un alto porcentaje de los premios.
Siempre fue el propietario del SPC el que financió esta decadencia al recibir cada día menos premios, frente a costos que no bajaron significativamente.
Esto también colaboró en la menor demanda de productos SPC en el interior, ya que la mayoría estima poder lograr la autofinanciación de la "cuida" y con estos premios se está lejos de alcanzarlo. No se debe olvidar que además se pierde una importante fuente de trabajo para los profesionales del sector.
Esta disminución de caballos en el interior se verá en poco tiempo reflejada en los principales hipódromos ya que un alto porcentaje de los anotados provienen de fuera de sus boxes.
En los "Máximos"
Reducir premios en Palermo y San Isidro (recordar anuncios de diciembre último), es un fuerte indicador de la crisis que afecta a todos los sectores. Es lógico que se intente una reducción de costos, pero en este caso cuando se llega a los premios, sería un indicador de que no quedan otros rubros por reducir, ya que se supone que, a largo plazo, a premios mayores se espera mayores inversiones y juego en el circuito del turf.
Sobre este tema se volverá mas adelante.
Los responsables del espectáculo.
Todo esto culmina en el espectáculo de las carreras de caballos en los hipódromos. Esta "venta del espectáculo" le corresponde generalmente a empresas privadas y solo uno o dos al sector oficial. En el interior su gestión es mala, tal lo que muestra la abundante desaparición de hipódromos o los que se tornan inoperantes.
Estos no encontraron las estrategias para lograr espectáculos que conlleven a la mayor demanda de SPC.
Los espectáculos más grandes e influyentes en los demás centros son los de Palermo, San Isidro y La Plata. Estos no encontraron las estrategias para lograr espectáculos que conlleven a la mayor demanda de SPC. Esto supone que a medida que esto se logre aumentarán las ventas de cada reunión hípica Consecuentemente se logrará una situación financiera fuerte y permitirá mayores premios, motivaciones, servicios, etc., etc., cerrando el circuito.
A pesar de aparecer el sistema de televisación y como consecuencia las agencias, que facilita al apostador la cercanía de un centro directo de apuestas, las ventas se estancaron.
Además todos sabemos que no existe la renovación de público apostador en la medida que sería deseable.
Los llamados a carreras para caballos de mucha edad, más las carreras de índices -cuyo abandono a partir de septiembre ha sido anunciado- han producido como mínimo dos perjuicios: 1) el interior no recibe muchos de esos SPC como lo hacía antes para continuar su campaña y 2) los haras no pueden vender sus productos de renovación o los retrasa con las consecuencias financieras por todos conocidas. Además es un indicador de ineficiencia ya que necesitan retener animales viejos para completar sus programas porque no existe un flujo suficiente de productos adquiridos para su reemplazo.
Debe reconocerse los esfuerzos que se realizaron y realizan para convocar mayor público a estos espectáculos pero o no tienen continuidad o no fueron acertados en lograr los objetivos buscados.
Si bien el Estado no realizó una gestión adecuada a cargo de los hipódromos, la actividad privada tampoco encontró todavía, a un juicio, estrategias claras y definidas para cumplir con los objetivos concordantes con la visión del negocio.
Casinos y Tragamonedas
Sobre los casinos que se inauguraban en Buenos Aires (en el Tigre y uno flotante) mucho se ha escrito y se los consideró oportunamente como el "principal y único" competidor o responsable directo de la no evolución del turf. A varios años de su habilitación nadie ha dado a conocer algún estudio que demuestre lo que se sostenía entonces. Sabemos que no favorece al turf pero más que impedir debemos pensar en evolucionar por nuestra organización y agresividad.
Por otra parte los tragamonedas se han convertido en el "salvador" del turf. Casi todos opinan que debe autorizarse su instalación a los hipódromos como solución.
Sólo los tragamonedas no salvarán al turf si este no se moderniza; pero pueden colaborar financieramente para ese cambio.
Se debe entender que puede ser un valioso aporte para destinar sus ganancias al turf, pero en el mediano plazo el turf debe lograr su autosostenimiento financiero sino no sería una actividad que pueda interesar ni al Estado ni a los privados. Sólo los tragamonedas no salvarán al turf si este no se moderniza.
Los costos de producción del SPC.
La teoría económica dice que si los costos de producción son muy altos y los criadores sobre ese costo quieren una ganancia. El valor final es muy alto y puede alejarse de lo que puede pagar la demanda.
Cuando un haras no vende en subasta pública algún producto es por que no hay ningún interesado o no se igualó el precio base. En este último caso supone este valor base igual al costo de producción. Como ya se dijo: si el valor final pretendido es alto bajará la demanda, siempre en relación a la calidad de la pieza.
En un prestigioso haras de la región donde me toca actuar (Santa Fe/Entre Ríos) hacen el siguiente análisis económico muy simple pero evidente:
Parten de la "unidad yegua" y contiene los costos de su cría. Los valores estimados por yegua madre y por mes para ellos es:
RUBRO $/mes Alimentación, principalmente avena $ 40.- Fardo de alfalfa de propia producción $ 15.- Mano de Obra permanente $ 15.- Gastos administrativos. $ 20.- Honorarios profesionales $ 22.- Cargas sociales $ 25.- Productos veterinarios/alimenticios. $ 18.- Impuestos/tasas $ 12.- Reparaciones en general $ 8.- TOTAL MES/yegua madre $ 175. -
En un año este valor se convierte en $ 2.100 ( 12m x $175)
Porcentaje de productos vendidos por madre es 66,66%.( Cada 3 yeguas madres producen 2 potrillos en condiciones de venta)
$ 2.100 x 1.34 = 2.814 $ por producto.
Este valor podría ser el flujo de caja de la producción de "un 2 años", sin considerar innumerables, rubros especialmente la implantación de praderas de alfalfa, intereses a los capitales invertidos, costos financieros, amortizaciones de: mejoras, maquinarias y vehículos, gastos del padrillo, etc..
... ese producto SPC debe ganar casi 4 carreras para pagar su precio inicial
Recordemos que a este valor de costo en efectivo, cercano a los $ 3.000, no se consiguieron vender gran parte de los productos ofrecidos en remates de la zona y unos pocos lo superaron.
Más allá de ser un problema de demanda o costo, ese producto debe competir en el interior por un premio cercano a los $ 800, es decir ese SPC debe ganar casi cuatro (4) carreras para pagar su precio inicial, sin considerar los originados por la doma y posteriormente aquellos otros para estar en condiciones de competir. Esta relación precio-premio son clara muestra del escaso entusiasmo esperado por lo menos en el interior.
El turf de Buenos Aires por TV al interior.
Está relacionado con el tema anterior. Es el factor que más influencia tiene en el mantenimiento de esta pasión e influye directamente en la demanda. Debería ser declarado de "interés nacional", pero por ser empresas privadas es lógico que pretendan ganancias. No obstante, quedan dudas si entregar imagen a centros de menor juego implica pérdidas o no ganar lo pretendido.
Todos sabemos que cuando corre en Buenos Aires un caballo de nuestra zona genera un lleno total en las agencias locales. Esto además de representar mayores montos de apuestas, implica un cierto nivel de orgulloso localismo que permite mantener viva la actividad y cerrar el circuito favoreciendo la selección en las haras y mayor demanda de SPC en la región.
Ambos se necesitan y potencian. Sin embargo con algunos centros del interior los intereses comunes están muy distantes
Hoy ya no se concibe desarrollo del turf local sin la complementación de la explotación de los circuitos máximos televisados y conectados a los totalizadores. Ambos se necesitan y potencian. Sin embargo con algunos centros del interior los intereses comunes están muy distantes y esto favorece la aparición de imágenes y explotación de carreras del exterior que aportan menos al desarrollo de la hípica nacional.
Sobre esto queda la duda referida a la eficiencia comparativa sobre imágenes e información producidas distantes alrededor de 11.000 km. frente a los aproximadamente 500 km. de Buenos Aires.
¿El mercado potencial del juego no será más factible desarrollarlo en el Gran Buenos Aires donde existen más de 12 millones de personas?. Si esto se lograra tal vez permita cubrir todos los costos fijos y se pueda entregar a otros centros más lejanos el servicio a solo los costos operativos para convertirla en rentable.
A veces uno piensa y compara: si al futbol lo salvó la televisión ya que a través de la publicidad o cables codificados generan ingresos que permite sobrevivir a clubes que prácticamente no tienen público y como consecuencia nada de recaudaciones. ¿ debemos descartar para el turf a este modelo u otro similar?. En fin, veremos qué pasa cuando el canal televisivo de Palermo alcanca nuestro medio.
La genética.
Entiendo que la calidad genética actual no es limitante para la colocación de los SPC. Sólo quedan dudas si en el pasado no se debió haber seguido rápidamente los pasos y/o métodos de otros países, como EE. UU. por ejemplo y lograr una mayor supremacía regional. Sobre este tema existen buenos especialistas en el país y ellos pueden opinar más correcta y contundentemente.
¿Los haras se guardan las mejores piezas?
Este es un tema muy relativo. Pero en el interior muchos propietarios no quieren comprar potrancas porque argumentan que es imposible competir con las reservadas por los haras. Dicen: "¿Cómo competir comprándole a ellos?". Se tiene la sensación de comprarle a Ferrari un auto para correrles en el mismo circuito y ellos con Schumacher arriba".
Para la hípica nacional es válido el caso de la reserva de potrancas como futuras madres de reposición, esto implicaría el mantenimiento del capital genético.
Las empresas de servicios de compra-venta.
Este es uno de los eslabones mas importantes en la colocación del SPC. Deben, entre otras cosas, como objetivo prioritario acercar la oferta con la demanda. Ultimamente parece que les es mas fácil juntar oferta que demanda y esto se refleja en los precios promedio.
Sin embargo es conocido el esfuerzo de alguna de ellas a nivel nacional para encontrar un camino distinto e innovador en este tema.
No se debe improvisar y es recomendable tomar servicios de empresas especializadas en esta materia.
En el interior antes se organizaba un remate de SPC a través de una persona que sabía "martillar" o estaba inscripto en el colegio correspondiente, pero esto hoy ya no es suficiente si no se conoce algo más de la demanda.
Obvio es que si se vende a buenos precios toda la producción ganan todos los componentes de la cadena del SPC. Por eso no se debe improvisar y es recomendable tomar servicios de empresas especializadas en esta materia.
En cualquier otro producto es muy importante en este mundo globalizado, identificar el segmento de mercado que demande determinado bien que producimos y a uno le queda la duda: ¿ para el SPC no es lo mismo?.
El juego clandestino.
Es el mejor socio en las ganancias. Su inversión es mínima y aprovecha los costos del espectáculo a cargo de las empresas concesionarias de los hipódromos. Al cortar el flujo de fondos de los que arriesgan impide cerrar el circuito de recaudación-premios-servicios, etc. afectando la demanda de SPC., etc. Sobre esto mucho se ha publicado en REVISTA PALERMO y otros medios.
Esto en general es un tema que no admite ninguna alternativa de análisis por su condición de ilegal.
Imágenes y apuestas de carreras del exterior.
En los últimos años ha aparecido en varias ciudades del interior una empresa de origen mejicano que transmite por TV y recibe apuestas de varios hipódromos de Estados Unidos, Méjico, carreras de trote, varios "galgódromos" y hasta carreras de mulas: de todos ellos recibe apuestas que aparentemente no ingresan al totalizador del "hipódromo" de origen. Entonces, de ser así, ¿no actúa como un levantador legalizado?.
Sabemos que estas empresas no posibilitan un reflujo de dinero hacia otros sectores de la cadena del turf (criadores, pedigrees, cuidadores, forrajeros, herreros etc) pero hay que aceptar que ocuparon un espacio vacío u olvidado por las empresas argentinas a cargo de los hipódromos más importantes. Es así que hoy se ven por imágenes televisivas, en varias ciudades del interior, carreras de otros países y hacen que queden en segundo plano las de nuestros principales centros hípicos.
En estos casos poco a poco el publico apostador prefiere y juega en carreras con imágenes (donde muchos no entienden la información que le dan) por sobre transmisiones de solo audio de las carreras nacionales, incluyendo galgos dentro de la preferencia.
Otra cosa que entusiasma al apostador son los sports más altos de estas carreras, derivadas sin duda del menor descuento sobre el total apostado.
Por otra parte otorgan un porcentaje muy superior sobre lo recaudado que lo ofrecido por las empresas nacionales, a los Jockeys Clubes que en el interior regentean este negocio. Aquí influyen factores tales como menores costos ya sea por su infraestructura amortizada por otros países, tecnología y capacidad empresarial.
El enfoque de demanda: ¿Qué es ser competitivo?
Las condiciones establecidas en las economías mundiales, dicen que lo que debe privar es la competitividad. Por lo tanto, quien no es competitivo no tendrá acceso a un mercado más chico o disminuido y además más exigente.
Muchos empresas no lograron un enfoque adecuado de reconversión. Continuaron realizando lo mismo, en especial centrándose en una visión interna del proceso. Esto es analizar sólo los procesos en busca de bajar costos abaratando insumos, ahorrando tiempo, mejorando calidad a criterio propio, etc., en lugar de aplicar la reconversión desde afuera hacia adentro. Para lograr esto se debe ir al mercado y averiguar qué se demanda y cuáles son los medios para captar y participar en esa demanda. Posteriormente se deberá mirar hacia adentro e identificar los procesos que darán resultados diferentes a lo anterior.
¿Cuáles son los riesgos de una producción que se inicia hoy y el producto a vender tiene que esperar 2 años?
Se desprende que la aplicación de la reconversión debe realizarse a través de los ojos del cliente. Pero ¿ Cuáles son los riesgos de una producción que se inicia hoy y el producto a vender tiene que esperar 2 años?. ¿La demanda identificada no puede cambiar en ese período?. Surge como consecuencia el concepto de "flexibilización" que no queda muy claro su aplicación en la cría de caballos.
En nuestra región existe el caso de un haras que buscó un segmento de mercado distinto y así coloca sus productos en Paraguay, afectándolo mucho menos los resultados de los remates que se realizan en la zona. Otros hacen denodados esfuerzos para identificar quienes serán sus futuros compradores, observando el desarrollo de nuevos centros cuadreros, la promoción de formas asociativas, el arrendamiento en proporción a carreras oficiales o no oficiales que se ganen, etc.
Nuevo rol del Estado.
Debe dejar de ser solo distribuidor de subsidios, y en más de una oportunidad dijimos: «Está bien pero no es suficiente».
Hoy se necesita una política que incluya a los «subsidios» como un componente más. A estos debe considerárselos como una ayuda financiera hacia el Jockey Club que lo recibe para que se convierta en un fondo motorizador de su futura rentabilidad empresarial.
Puede reivindicarse el rol del Estado como orientador de la actividad sin llegar al intervencionismo
Para esto debe existir una contrapartida económica bien programada de ese Jockey Club. De lo contrario sucede lo actual, donde la mayor proporción de la bolsa anual de premios la aporta el Estado (en los Premios Selectivos es casi el 100%) y la contrapartida es deficiente e incorrectamente dirigida que no genera retornos para el crecimiento sostenido. Hoy cualquier Banco exige saber donde va a invertir el crédito que el cliente solicita y como será el resultado empresarial futuro, aquí debe implementarse algo similar desde el punto de vista de su metodología.
Esto implica que puede reivindicarse el rol del Estado como orientador de la actividad sin llegar al intervencionismo y si muchos sectores solicitan que la Secretaría pase a ser Ministerio, creo que la simplificada Dirección de Actividades Hípicas debería jerarquizarse en igual sentido.
Algunas consideraciones finales
Ninguna de estas causas deben considerarse en forma aislada y como única causante de cierto deterioro o éxito, sino que el conjunto de ellas (y otras que faltan) deben en forma conjunta tratar de colaborar para encontrar entre todos los sectores el mejoramiento de la actividad. Tampoco un solo sector o eslabón puede solucionar la totalidad de los problemas que son muy complejos. Tampoco nadie debe sentirse "tocado" o agredido por la opinión no coincidente de otros.
El turf está en una situación grave, no debemos pensar y esperar que "alguien" lo arregle, además es el momento de dejar de creer que "solo yo tengo la verdad y la solución"
Pero todo aquel que cree poder aportar en este sentido debe realizarlo y aprovechar la oportunidad que solo PALERMO BLANCA nos puede ofrecer, por el permanente apoyo de su conductor, que es un incansable Director-motivador en estos temas.
La mejor manera de esconder nuestras ineficiencias es decir "que todo de debe a la crisis económica", o " a la globalización" o decir; "no hay un peso en la calle" que son expresiones conocidas desde hace años y sin embargo muchos sectores progresaron significativamente.
El turf está en una situación grave. No debemos pensar y esperar que "alguien" lo arregle. Además es el momento de dejar de creer que "solo yo tengo la verdad y la solución" será necesario mayor flexibilidad y comprensión en cada posición y en general una mayor apertura hacia nuevos enfoques porque los que servían hace 10 ó 15 años hoy son caducos. El mundo cambió. Pero el turf sigue siendo muy noble y nos permite opinar a mucha gente.
Esta nota, si bien tiene una visión desde el interior, espera despertar inquietudes en aquellos que participan activamente en esta cadena que se inicia en los haras y finaliza en las apuestas, retroalimentándose y que, lamentablemente, hoy ninguno de estos eslabones se encuentran en condiciones económicas favorables. Es decir que mejorando o arreglando alguno de esos eslabones o sectores que componen este negocio complejo, no puede pretenderse arreglar la totalidad del turf. Cada sector deberá participar y ceder algo para encontrar la solución en el mediano a largo plazo.
Seguidamente se intenta analizar una serie de variables (no todas) que se entienden son las principales que afectaron tanto a la demanda como a la oferta de caballos de carreras y las situaciones que se crearon.
El Pasado y el Estado Hípico comprador.
No hace muchos años se producía un SPC porque se disponía de los medios (campo, boxes padrillo, madres, etc.) y después se veía donde se los podía colocar, pero casi siempre se colocaban. Muchas pueden ser las razones de esa colocación: la inflación y los créditos, mayor poder económico de los potenciales compradores, mejores premios que aumentaban las expectativas del propietario inversor, etc.
Pero aceptemos que existía una política generalizada en casi todo el mundo, que era la intervención estatal que casi siempre lo hacía favoreciendo un sector a costa de las pérdidas de otro, sin que esto tuviera un sentido de equidad que es uno de sus objetivos prioritarios.
Al "Estado Hípico" muchos nunca le pagaron, a otros se les morían o desaparecían rápida y dudosamente los caballos y pocos pagaron como corresponde.
En ese período a un hipódromo del interior llegaban desde los remates de Buenos Aires alrededor de 100 productos. Estas compras se realizaban a través de un organismo estatal que se hacía responsable, pero luego cuando tenía que recuperar esos fondos surgían innumerables inconvenientes. Al "Estado Hípico" muchos nunca le pagaron y no se les exigía, a otros se les morían los productos rápida y dudosamente, otros debían un porcentaje de premios que decían nunca ganaron, etc. etc., y pocos pagaron como corresponde.
Entonces quién arriesgaba, ¿el particular que producía y asumía ese riesgo empresarial, el comprador que ve lo que compra y decide o la sociedad toda a través del Estado?.
En los últimos años en casi todo el mundo, como en el país, el rol del Estado ha cambiado radicalmente y nadie debe pensar que puede volver a participar en idénticas condiciones como comprador. Es un comprador que desapareció.
La producción : el enfoque de oferta:
En el enfoque de oferta se dice: "como tengo los medios para producir algo, lo hago y luego veré cómo y a cuánto lo vendo". Esto significa que no se tiene previamente en cuenta si ese producto tiene verdadera demanda en el mercado.
Otros SPC se producen en establecimientos cuya actividad principal son los cultivos agrícolas y la ganadería vacuna, por lo que "el haras" se convierte en un rubro subsidiado por esas actividades.
Asociado con lo anterior, este enfoque se veía favorecido por la presencia del "Estado comprador", más las otras causas ya descriptas.
Otro enfoque de oferta son los SPC que se producen en establecimientos cuya actividad principal son los cultivos agrícolas y la ganadería vacuna, por lo que "el haras" se convierte en un rubro que internamente se ve subsidiado por esas actividades. Pero la situación mundial de precios de los productos especialmente agrícolas, que disminuyeron en aproximadamente el 50% en los últimos tres años, hace que ese subsidio interno sea exageradamente caro para sus ingresos menguados y se replanteen las posibilidades de continuar produciendo SPC aún en condiciones de costos inferiores a los de un haras de aceptable nivel.
Es decir que en estos casos se tiende, con cierta racionalidad, a eliminar la actividad menos rentable y en la mayoría de los casos es el sector "producción de SPC".
Diferente generación empresarial.
De la generación de empresarios que decidieron hacer SPC a cualquier costo, algunos ya están cansados, otros ya se retiraron y los herederos no tienen la misma pasión que sus fundadores. Tal vez esto colaboró en la desaparición de varios haras prestigiosos en los últimos años.
Este hecho tiene dos lecturas encontradas: la primera dice que disminuye la oferta de productos lo que hace que se encarezcan los pocos que se ofrecen; y la otra considera que se retiran del mercado aquellos que no podían competir y esto
Tal vez esto colaboró en la desaparición de varios haras prestigiosos en los últimos años
beneficia a las empresas dedicadas exclusivamente a esta producción. Su calidad es superior y consecuentemente vale más su producto. En las nuevas generaciones este último concepto está más arraigado porque se puede lograr con la especialidad una mayor calidad competitiva.
El mercado ampliado del Sur.
El MERCOSUR parece ser una incógnita para la colocación de caballos de carreras desde Argentina. No se habla de ventas en igual forma y cantidad que otros productos argentinos ( electrodomésticos, trigo, harinas, frutas, etc..). Es por ello que nos podemos preguntar: ¿No hemos evolucionado en este tema frente a los demás países de la región? ¿No es mercado para el SPC argentino, por ejemplo el turfman brasileño?.
El MERCOSUR parece ser una incógnita para la colocación de caballos de carreras desde Argentina
¿Nos perjudica el tipo de cambio?. En el últimos años en Brasil la moneda se desvalorizó cerca de un 250%, ¿esto encareció nuestros productos?. ¿Los aranceles intra Mercosur perjudican a los SPC?. ¿Tienen todavía excesivo impuesto u otras trabas a la exportación a otros países?
Es un tema que es necesario esclarecer a través de especialistas.
Los premios.
En el interior
Sobre la situación de los Jockeys Clubs del interior es mucho lo que se puede opinar en función de: la desaparición de muchos de ellos, la situación critica de otros y de los pocos que quedan en condiciones financieras saludables.
Los premios fueron disminuyendo hasta desaparecer las carreras en muchos Jockeys Clubes. Algunos vendieron el hipódromo, otros abandonaron definitivamente la organización de carreras, algunos hacen dos o tres reuniones al año y en esta situación (desmejorada) siempre fue el propietario del SPC el que financió esta decadencia al recibir cada día menos premios, frente a costos que no bajaron significativamente.
En algunos casos se agrava para el propietario del interior cuando para correr se le exige a cada caballo valores para la inscripción, ratificación, remate obligatorio, etc., es decir también pone, de esta manera, un alto porcentaje de los premios.
Siempre fue el propietario del SPC el que financió esta decadencia al recibir cada día menos premios, frente a costos que no bajaron significativamente.
Esto también colaboró en la menor demanda de productos SPC en el interior, ya que la mayoría estima poder lograr la autofinanciación de la "cuida" y con estos premios se está lejos de alcanzarlo. No se debe olvidar que además se pierde una importante fuente de trabajo para los profesionales del sector.
Esta disminución de caballos en el interior se verá en poco tiempo reflejada en los principales hipódromos ya que un alto porcentaje de los anotados provienen de fuera de sus boxes.
En los "Máximos"
Reducir premios en Palermo y San Isidro (recordar anuncios de diciembre último), es un fuerte indicador de la crisis que afecta a todos los sectores. Es lógico que se intente una reducción de costos, pero en este caso cuando se llega a los premios, sería un indicador de que no quedan otros rubros por reducir, ya que se supone que, a largo plazo, a premios mayores se espera mayores inversiones y juego en el circuito del turf.
Sobre este tema se volverá mas adelante.
Los responsables del espectáculo.
Todo esto culmina en el espectáculo de las carreras de caballos en los hipódromos. Esta "venta del espectáculo" le corresponde generalmente a empresas privadas y solo uno o dos al sector oficial. En el interior su gestión es mala, tal lo que muestra la abundante desaparición de hipódromos o los que se tornan inoperantes.
Estos no encontraron las estrategias para lograr espectáculos que conlleven a la mayor demanda de SPC.
Los espectáculos más grandes e influyentes en los demás centros son los de Palermo, San Isidro y La Plata. Estos no encontraron las estrategias para lograr espectáculos que conlleven a la mayor demanda de SPC. Esto supone que a medida que esto se logre aumentarán las ventas de cada reunión hípica Consecuentemente se logrará una situación financiera fuerte y permitirá mayores premios, motivaciones, servicios, etc., etc., cerrando el circuito.
A pesar de aparecer el sistema de televisación y como consecuencia las agencias, que facilita al apostador la cercanía de un centro directo de apuestas, las ventas se estancaron.
Además todos sabemos que no existe la renovación de público apostador en la medida que sería deseable.
Los llamados a carreras para caballos de mucha edad, más las carreras de índices -cuyo abandono a partir de septiembre ha sido anunciado- han producido como mínimo dos perjuicios: 1) el interior no recibe muchos de esos SPC como lo hacía antes para continuar su campaña y 2) los haras no pueden vender sus productos de renovación o los retrasa con las consecuencias financieras por todos conocidas. Además es un indicador de ineficiencia ya que necesitan retener animales viejos para completar sus programas porque no existe un flujo suficiente de productos adquiridos para su reemplazo.
Debe reconocerse los esfuerzos que se realizaron y realizan para convocar mayor público a estos espectáculos pero o no tienen continuidad o no fueron acertados en lograr los objetivos buscados.
Si bien el Estado no realizó una gestión adecuada a cargo de los hipódromos, la actividad privada tampoco encontró todavía, a un juicio, estrategias claras y definidas para cumplir con los objetivos concordantes con la visión del negocio.
Casinos y Tragamonedas
Sobre los casinos que se inauguraban en Buenos Aires (en el Tigre y uno flotante) mucho se ha escrito y se los consideró oportunamente como el "principal y único" competidor o responsable directo de la no evolución del turf. A varios años de su habilitación nadie ha dado a conocer algún estudio que demuestre lo que se sostenía entonces. Sabemos que no favorece al turf pero más que impedir debemos pensar en evolucionar por nuestra organización y agresividad.
Por otra parte los tragamonedas se han convertido en el "salvador" del turf. Casi todos opinan que debe autorizarse su instalación a los hipódromos como solución.
Sólo los tragamonedas no salvarán al turf si este no se moderniza; pero pueden colaborar financieramente para ese cambio.
Se debe entender que puede ser un valioso aporte para destinar sus ganancias al turf, pero en el mediano plazo el turf debe lograr su autosostenimiento financiero sino no sería una actividad que pueda interesar ni al Estado ni a los privados. Sólo los tragamonedas no salvarán al turf si este no se moderniza.
Los costos de producción del SPC.
La teoría económica dice que si los costos de producción son muy altos y los criadores sobre ese costo quieren una ganancia. El valor final es muy alto y puede alejarse de lo que puede pagar la demanda.
Cuando un haras no vende en subasta pública algún producto es por que no hay ningún interesado o no se igualó el precio base. En este último caso supone este valor base igual al costo de producción. Como ya se dijo: si el valor final pretendido es alto bajará la demanda, siempre en relación a la calidad de la pieza.
En un prestigioso haras de la región donde me toca actuar (Santa Fe/Entre Ríos) hacen el siguiente análisis económico muy simple pero evidente:
Parten de la "unidad yegua" y contiene los costos de su cría. Los valores estimados por yegua madre y por mes para ellos es:
RUBRO $/mes Alimentación, principalmente avena $ 40.- Fardo de alfalfa de propia producción $ 15.- Mano de Obra permanente $ 15.- Gastos administrativos. $ 20.- Honorarios profesionales $ 22.- Cargas sociales $ 25.- Productos veterinarios/alimenticios. $ 18.- Impuestos/tasas $ 12.- Reparaciones en general $ 8.- TOTAL MES/yegua madre $ 175. -
En un año este valor se convierte en $ 2.100 ( 12m x $175)
Porcentaje de productos vendidos por madre es 66,66%.( Cada 3 yeguas madres producen 2 potrillos en condiciones de venta)
$ 2.100 x 1.34 = 2.814 $ por producto.
Este valor podría ser el flujo de caja de la producción de "un 2 años", sin considerar innumerables, rubros especialmente la implantación de praderas de alfalfa, intereses a los capitales invertidos, costos financieros, amortizaciones de: mejoras, maquinarias y vehículos, gastos del padrillo, etc..
... ese producto SPC debe ganar casi 4 carreras para pagar su precio inicial
Recordemos que a este valor de costo en efectivo, cercano a los $ 3.000, no se consiguieron vender gran parte de los productos ofrecidos en remates de la zona y unos pocos lo superaron.
Más allá de ser un problema de demanda o costo, ese producto debe competir en el interior por un premio cercano a los $ 800, es decir ese SPC debe ganar casi cuatro (4) carreras para pagar su precio inicial, sin considerar los originados por la doma y posteriormente aquellos otros para estar en condiciones de competir. Esta relación precio-premio son clara muestra del escaso entusiasmo esperado por lo menos en el interior.
El turf de Buenos Aires por TV al interior.
Está relacionado con el tema anterior. Es el factor que más influencia tiene en el mantenimiento de esta pasión e influye directamente en la demanda. Debería ser declarado de "interés nacional", pero por ser empresas privadas es lógico que pretendan ganancias. No obstante, quedan dudas si entregar imagen a centros de menor juego implica pérdidas o no ganar lo pretendido.
Todos sabemos que cuando corre en Buenos Aires un caballo de nuestra zona genera un lleno total en las agencias locales. Esto además de representar mayores montos de apuestas, implica un cierto nivel de orgulloso localismo que permite mantener viva la actividad y cerrar el circuito favoreciendo la selección en las haras y mayor demanda de SPC en la región.
Ambos se necesitan y potencian. Sin embargo con algunos centros del interior los intereses comunes están muy distantes
Hoy ya no se concibe desarrollo del turf local sin la complementación de la explotación de los circuitos máximos televisados y conectados a los totalizadores. Ambos se necesitan y potencian. Sin embargo con algunos centros del interior los intereses comunes están muy distantes y esto favorece la aparición de imágenes y explotación de carreras del exterior que aportan menos al desarrollo de la hípica nacional.
Sobre esto queda la duda referida a la eficiencia comparativa sobre imágenes e información producidas distantes alrededor de 11.000 km. frente a los aproximadamente 500 km. de Buenos Aires.
¿El mercado potencial del juego no será más factible desarrollarlo en el Gran Buenos Aires donde existen más de 12 millones de personas?. Si esto se lograra tal vez permita cubrir todos los costos fijos y se pueda entregar a otros centros más lejanos el servicio a solo los costos operativos para convertirla en rentable.
A veces uno piensa y compara: si al futbol lo salvó la televisión ya que a través de la publicidad o cables codificados generan ingresos que permite sobrevivir a clubes que prácticamente no tienen público y como consecuencia nada de recaudaciones. ¿ debemos descartar para el turf a este modelo u otro similar?. En fin, veremos qué pasa cuando el canal televisivo de Palermo alcanca nuestro medio.
La genética.
Entiendo que la calidad genética actual no es limitante para la colocación de los SPC. Sólo quedan dudas si en el pasado no se debió haber seguido rápidamente los pasos y/o métodos de otros países, como EE. UU. por ejemplo y lograr una mayor supremacía regional. Sobre este tema existen buenos especialistas en el país y ellos pueden opinar más correcta y contundentemente.
¿Los haras se guardan las mejores piezas?
Este es un tema muy relativo. Pero en el interior muchos propietarios no quieren comprar potrancas porque argumentan que es imposible competir con las reservadas por los haras. Dicen: "¿Cómo competir comprándole a ellos?". Se tiene la sensación de comprarle a Ferrari un auto para correrles en el mismo circuito y ellos con Schumacher arriba".
Para la hípica nacional es válido el caso de la reserva de potrancas como futuras madres de reposición, esto implicaría el mantenimiento del capital genético.
Las empresas de servicios de compra-venta.
Este es uno de los eslabones mas importantes en la colocación del SPC. Deben, entre otras cosas, como objetivo prioritario acercar la oferta con la demanda. Ultimamente parece que les es mas fácil juntar oferta que demanda y esto se refleja en los precios promedio.
Sin embargo es conocido el esfuerzo de alguna de ellas a nivel nacional para encontrar un camino distinto e innovador en este tema.
No se debe improvisar y es recomendable tomar servicios de empresas especializadas en esta materia.
En el interior antes se organizaba un remate de SPC a través de una persona que sabía "martillar" o estaba inscripto en el colegio correspondiente, pero esto hoy ya no es suficiente si no se conoce algo más de la demanda.
Obvio es que si se vende a buenos precios toda la producción ganan todos los componentes de la cadena del SPC. Por eso no se debe improvisar y es recomendable tomar servicios de empresas especializadas en esta materia.
En cualquier otro producto es muy importante en este mundo globalizado, identificar el segmento de mercado que demande determinado bien que producimos y a uno le queda la duda: ¿ para el SPC no es lo mismo?.
El juego clandestino.
Es el mejor socio en las ganancias. Su inversión es mínima y aprovecha los costos del espectáculo a cargo de las empresas concesionarias de los hipódromos. Al cortar el flujo de fondos de los que arriesgan impide cerrar el circuito de recaudación-premios-servicios, etc. afectando la demanda de SPC., etc. Sobre esto mucho se ha publicado en REVISTA PALERMO y otros medios.
Esto en general es un tema que no admite ninguna alternativa de análisis por su condición de ilegal.
Imágenes y apuestas de carreras del exterior.
En los últimos años ha aparecido en varias ciudades del interior una empresa de origen mejicano que transmite por TV y recibe apuestas de varios hipódromos de Estados Unidos, Méjico, carreras de trote, varios "galgódromos" y hasta carreras de mulas: de todos ellos recibe apuestas que aparentemente no ingresan al totalizador del "hipódromo" de origen. Entonces, de ser así, ¿no actúa como un levantador legalizado?.
Sabemos que estas empresas no posibilitan un reflujo de dinero hacia otros sectores de la cadena del turf (criadores, pedigrees, cuidadores, forrajeros, herreros etc) pero hay que aceptar que ocuparon un espacio vacío u olvidado por las empresas argentinas a cargo de los hipódromos más importantes. Es así que hoy se ven por imágenes televisivas, en varias ciudades del interior, carreras de otros países y hacen que queden en segundo plano las de nuestros principales centros hípicos.
En estos casos poco a poco el publico apostador prefiere y juega en carreras con imágenes (donde muchos no entienden la información que le dan) por sobre transmisiones de solo audio de las carreras nacionales, incluyendo galgos dentro de la preferencia.
Otra cosa que entusiasma al apostador son los sports más altos de estas carreras, derivadas sin duda del menor descuento sobre el total apostado.
Por otra parte otorgan un porcentaje muy superior sobre lo recaudado que lo ofrecido por las empresas nacionales, a los Jockeys Clubes que en el interior regentean este negocio. Aquí influyen factores tales como menores costos ya sea por su infraestructura amortizada por otros países, tecnología y capacidad empresarial.
El enfoque de demanda: ¿Qué es ser competitivo?
Las condiciones establecidas en las economías mundiales, dicen que lo que debe privar es la competitividad. Por lo tanto, quien no es competitivo no tendrá acceso a un mercado más chico o disminuido y además más exigente.
Muchos empresas no lograron un enfoque adecuado de reconversión. Continuaron realizando lo mismo, en especial centrándose en una visión interna del proceso. Esto es analizar sólo los procesos en busca de bajar costos abaratando insumos, ahorrando tiempo, mejorando calidad a criterio propio, etc., en lugar de aplicar la reconversión desde afuera hacia adentro. Para lograr esto se debe ir al mercado y averiguar qué se demanda y cuáles son los medios para captar y participar en esa demanda. Posteriormente se deberá mirar hacia adentro e identificar los procesos que darán resultados diferentes a lo anterior.
¿Cuáles son los riesgos de una producción que se inicia hoy y el producto a vender tiene que esperar 2 años?
Se desprende que la aplicación de la reconversión debe realizarse a través de los ojos del cliente. Pero ¿ Cuáles son los riesgos de una producción que se inicia hoy y el producto a vender tiene que esperar 2 años?. ¿La demanda identificada no puede cambiar en ese período?. Surge como consecuencia el concepto de "flexibilización" que no queda muy claro su aplicación en la cría de caballos.
En nuestra región existe el caso de un haras que buscó un segmento de mercado distinto y así coloca sus productos en Paraguay, afectándolo mucho menos los resultados de los remates que se realizan en la zona. Otros hacen denodados esfuerzos para identificar quienes serán sus futuros compradores, observando el desarrollo de nuevos centros cuadreros, la promoción de formas asociativas, el arrendamiento en proporción a carreras oficiales o no oficiales que se ganen, etc.
Nuevo rol del Estado.
Debe dejar de ser solo distribuidor de subsidios, y en más de una oportunidad dijimos: «Está bien pero no es suficiente».
Hoy se necesita una política que incluya a los «subsidios» como un componente más. A estos debe considerárselos como una ayuda financiera hacia el Jockey Club que lo recibe para que se convierta en un fondo motorizador de su futura rentabilidad empresarial.
Puede reivindicarse el rol del Estado como orientador de la actividad sin llegar al intervencionismo
Para esto debe existir una contrapartida económica bien programada de ese Jockey Club. De lo contrario sucede lo actual, donde la mayor proporción de la bolsa anual de premios la aporta el Estado (en los Premios Selectivos es casi el 100%) y la contrapartida es deficiente e incorrectamente dirigida que no genera retornos para el crecimiento sostenido. Hoy cualquier Banco exige saber donde va a invertir el crédito que el cliente solicita y como será el resultado empresarial futuro, aquí debe implementarse algo similar desde el punto de vista de su metodología.
Esto implica que puede reivindicarse el rol del Estado como orientador de la actividad sin llegar al intervencionismo y si muchos sectores solicitan que la Secretaría pase a ser Ministerio, creo que la simplificada Dirección de Actividades Hípicas debería jerarquizarse en igual sentido.
Algunas consideraciones finales
Ninguna de estas causas deben considerarse en forma aislada y como única causante de cierto deterioro o éxito, sino que el conjunto de ellas (y otras que faltan) deben en forma conjunta tratar de colaborar para encontrar entre todos los sectores el mejoramiento de la actividad. Tampoco un solo sector o eslabón puede solucionar la totalidad de los problemas que son muy complejos. Tampoco nadie debe sentirse "tocado" o agredido por la opinión no coincidente de otros.
El turf está en una situación grave, no debemos pensar y esperar que "alguien" lo arregle, además es el momento de dejar de creer que "solo yo tengo la verdad y la solución"
Pero todo aquel que cree poder aportar en este sentido debe realizarlo y aprovechar la oportunidad que solo PALERMO BLANCA nos puede ofrecer, por el permanente apoyo de su conductor, que es un incansable Director-motivador en estos temas.
La mejor manera de esconder nuestras ineficiencias es decir "que todo de debe a la crisis económica", o " a la globalización" o decir; "no hay un peso en la calle" que son expresiones conocidas desde hace años y sin embargo muchos sectores progresaron significativamente.
El turf está en una situación grave. No debemos pensar y esperar que "alguien" lo arregle. Además es el momento de dejar de creer que "solo yo tengo la verdad y la solución" será necesario mayor flexibilidad y comprensión en cada posición y en general una mayor apertura hacia nuevos enfoques porque los que servían hace 10 ó 15 años hoy son caducos. El mundo cambió. Pero el turf sigue siendo muy noble y nos permite opinar a mucha gente.
No hay comentarios:
Publicar un comentario