RICARDO DANIEL RODRIGUEZ SALTO (17)
Antes de comenzar con este tema, creo conveniente hacer una pequeña introducción. A los noveles criadores, (que son a quienes más van dirigidas estas notas), como en algún momento me sucedió a mi, se les habla de inbreeding, linebreeding y outcrossing, sin explicarles qué es esto de la genética y por qué razón todo el mundo anda loco detrás de ello. Lo único que se les indica son los procedimientos de crianza y se les dice “...Ud. puede seguir cualquiera de estos métodos...·, pero ellos no entienden la razón de porqué uno si y otro no.
Ya expliqué que no soy genetista ni profesional de las ciencias veterinarias, pero en mi pampeano básico tuve que aprender y comprender sólo sin que nadie me ayudara, las razones de los métodos de cría; en mi caso quiero trasmitir lo poco que incorporé; quien se va a iniciar en esto debería conocer las razones, luego si las aplica o no, queda a su criterio; lo que me parece ridículo es que se decida invertir una suma de dinero y la inversión esté sometida a los avatares de la
ignorancia.
Esta explicación no quiere decir que va a acertar si o si; simplemente va a tratar de evitar algunos errores. El pura sangre de carrera, como bien lo explica F. Tesio en su libro, es un híbrido que se rige por las leyes de Mendel. Pero además de eso, Tesio se guardó muy bien de explicar “cómo funcionan las cosas” .
En mi largo derrotero, y golpearme sin encontrar el camino, llegó un momento que pensé que la única forma de comprender el sistema, era analizando desde el comienzo de la crianza, los años 1650 en adelante, cada uno de los caballos que fueron exitosos en aquellos tiempos. Fue así que utilizando la computadora en la página web de pedigree query, pedí el pedigree de Eclipse en 7 generaciones.
Y fue allí que comencé a ver cosas raras; observaba que estos animales habían sido criados bajo la técnica de inbreeding o linebreeding.
Pensé que era ese animal solo y que en los demás esto no se daría, así que pedí e imprimí el pedigree de Herod. Vuelta lo mismo. Luego hice lo mismo con otro y con otro y con otro. Se repetía la constante de consanguinidad; en algunos un poco más lejos y en otros más cerca, inclusive al llegar a las décadas de 1920 hasta la mitad de la centuria aproximadamente un francés llamado Marcel Bousac, hacía una consanguinidad sorprendente por lo cercana y funcionaba a la perfección; así creo a Tourbillón, etc., etc.
En nuestros días no hay en el pura sangre de carrera, quien continúe este método en forma tan cercana, pero no quiere decir que eso no se aplique en el mundo en otras razas; sólo baste remitirlo a la pagina web de Larry Thorton que fabrica Quarter Horse en EEUU y verá lo duro del método de consanguinidad.
Como sugerencia le invito a traducir sus artículos y cuando llegue a la parte que él se refiera a algún caballo, por ejemplo LEO, que es uno de los grandes, ingrese a la página de pedigree query para Quarter Horse y baje ese pedigree. Y hágalo con todos los que el cita en sus trabajos. Observará la práctica constante de este sistema que saca y saca campeones mundiales.
No es mi idea ingresarlo a Ud. a este sistema de crianza con consanguinidad tan cercana, sino que sepa que esto se hace y da resultados. ¿Y porque lo envío allí?
Bueno, ellos mismos dan el método de cómo hacer para depurar los problemas que la consanguinidad les ha traído.
Sintéticamente dicho, hacen consanguíneo al semental, por ejemplo al animal A y luego hacen consanguínea a la yegua, por ej. al animal B; luego los cruzan entre sí. Si bien ellos son consanguíneos por si, no lo son en el cruce entre la yegua y el semental.
De esta forma, hacen lo que se denomina un hibrido. Esto purga todos los problemas que pudo haber traído el sistema consanguíneo y lo que nace es un nuevo pool de genes que conforma un animal formidable.
En la próxima nota entraremos a las razones genéticas del porqué funciona este sistema.
RICARDO DANIEL RODRIGUEZ SALTO
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