| 09/11/2008
La cántabra María Álvarez, con la monta de Nobby, se proclamó ayer en Malaisia campeona del mundo en la disciplina de raid, sobre una distancia de 160 kilómetros, recorrida por la noche en su mayor parte, bajo una tormenta eléctrica que se inició por la mañana y con altas temperaturas y fuerte humedad. Unas condiciones que hicieron aún más difícil la prueba de resistencia.
María Álvarez se llevó el oro en una disciplina que pone a prueba la resistencia física y psicológica de caballo y jinete, que tienen que recorrer esas grandes distancias en un solo día y contrarreloj.
En solitario.
La española realizó las tres últimas partes del recorrido en solitario y llegó a la meta con una ventaja de 9:49 sobre Agustín Vita, de Argentina, sobre Baraka ibn al Tamah, y 21:25 sobre Sultan bin Sulayem, de los Emiratos Árabes, que montaba a Tazoul el Parry.
Se confirma la posición de España como referente mundial en esta modalidad hípica, tras la victoria en categoría masculina de Miquel Vila en el Mundial del año pasado. Ningún país había repetido.
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