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PEDRO KLEINHANS GERENTE Y PROPIETARIO DEL HOTEL RURAL EL TESORILLO II
PEDRO KLEINHANS GERENTE Y PROPIETARIO DEL HOTEL RURAL EL TESORILLO II
«Los problemas económicos afectan ya al comportamiento del turista español»
A CABALLO. Pedro Kleinhans ha hecho de su sueño, el turismo y los caballos, su método de vida. / L. V.
Pedro Kleinhans es un alemán afincado en Arcos que se dedica al sector turístico. Este ingeniero en electrónica abandonó su Alemania natal, hace quince años, para trasladarse a la localidad serrana y cumplir su sueño, construir un hotel rural muy vinculado al mundo del caballo, ya que en 1982 se enamoró de Andalucía. Para ello trabajó duro, junto a su esposa arcense Ana Rodríguez, con el fin de que poder materializarlo. Hoy, diecisiete años después de su puesta en marcha, su sueño es toda una realidad y se ha convertido en un precioso alojamiento turístico, un cortijo andaluz donde se puede disfrutar de la luz, la tranquilidad y la naturaleza.
-¿Cómo evoluciona el Turismo en la zona?
-La Junta está apostando muy fuerte por el Turismo y está consiguiendo que tengamos presencia en ferias internacionales, como Berlín, por ejemplo. Eso está ayudando pero aún queda mucho por hacer. Además, el turismo nacional ha venido creciendo aunque ultimamente se está notando un bajón importante, como consecuencia de la situación económica del país.
-De cara al futuro ¿cómo cree que evolucionará el sector?
-Tenemos un potencial enorme y muchas esperanzas en que todo va a salir bien. No obstante, a los pequeños empresarios nos ponen las cosas muy complicadas desde las administraciones porque constantemente están obligándonos a modificar cosas, por los cambios de las leyes. Deberían de ser más considerados con los empresarios. En cuanto a Arcos, se está apostando mucho por el turismo y además las infraestructuras mejoran a muy buen ritmo. Buena prueba de ello es la nueva autovía, la piscina cubierta que se está construyendo o los proyectos de musealización.
-¿Qué canales de comercialización utilizáis?
-Dentro de nuestras posibilidades tratamos de invertir en publicidad para que la gente venga a conocernos, hacemos un esfuerzo grande. No obstante, internet se ha convertido en la herramienta clave porque permite que nos puedan conocer en todo el mundo y que los posibles turistas puedan planificar su viaje. De todos modos, el canal más efectivo es el boca a boca, nuestros clientes no sólo repiten, sino que nos mandan a conocidos, amigos y familiares.
-¿De dónde vienen los turistas que nos visitan?
-En nuestro caso, el turista que más nos visita es el alemán. Para nosotros supone el 60% del total de las visitas, y la mitad de ellos viene motivado por los caballos. También tenemos visitantes franceses, canadienses, americanos, etc. Además de españoles, aunque estos están decreciendo, debido a la actual situación económica.
-¿Qué ocupación media registráis y cuáles son las épocas de mayor demanda?
-El año pasado llegamos al 42% y este año nos conformamos con llegar al 40%. Aquí la temporada alta llega en marzo, con el tema del motociclismo. A nosotros nos visita el equipo Kawasaki, que viene tres veces al año. El mes de julio y el trimestre desde noviembre a enero, son los meses más flojos.
-¿Resulta necesario diversificar la oferta?.
-Sin duda. Tenemos muchos atractivos naturales y culturales pero al turista hay que darle algo más. Eso lo tuve claro al poner en marcha mi sueño, ya que lo vinculé a mi verdadera pasión, el mundo del caballo. Con el apoyo de mi suegro y mi cuñado, dos personas muy reconocidas en este mundo, he conseguido una oferta interesante y hoy imparto clases en español, inglés, alemán y francés en mi hotel. Además, se pueden dar paseos en mis caballos e incluso tengo ponies para que aprendan los niños. En Arcos necesitamos más oferta cultural y aprovechar los recursos naturales que tenemos, como el pantano que está infrautilizado, con el fin de que se acote la estacionalidad. Tenemos que dejar de ser un destino de un día y para ello hay que mejorar la oferta de ocio y la cultural que se hace a los visitantes.
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