Las fiestas del Maíz y del Turismo en el cantón Rumiñahui duraron 14 días. La celebración terminará mañana con una corrida de toros populares.
El fin de semana, el cantón Rumiñahui, ubicado a 35 minutos de Quito, festejó a lo grande sus fiestas del Maíz y del Turismo. El sábado en las calles de Sangolquí se reemplazaron los autos por caballos. Los danzantes y bandas de pueblo participaron en el tradicional Paseo del Chagra.
Cerca de 1800 jinetes, vestidos con poncho, zamarro y sombrero se agruparon en el parque Santa Clara, a las 09:00, para recorrer a galope y demostrar las habilidades de los caballos ante los asistentes y el jurado.
Su origen se remonta a la última erupción del Cotopaxi, en 1886. Los habitantes de la zona acudieron al párroco de ese entonces para solicitarle que se trasladara el Señor de la Santa Escuela a las laderas del volcán.
Los chagras feligreses montaban sus caballos adornados, dando origen al Paseo Procesional del Chagra. Este acto serealiza en Machachi y Sangolquí.
Fausto Bastidas, jinete de la hacienda Miraflores de Sangolquí, hizo bailar a su caballo de nombre Carpintero. Hasta se acostó con él en medio de la vía. Los asistentes no dejaron de aplaudir las piruetas de los equinos . Al evento asistieron chagras de Guaranda, Machachi, Ambato, Riobamba, Cayambe, Píntag, Alangasí...
Los festejos también fueron con puntas. Carlos Tituaña, nativo del cantón, recordó que las fiestas del Maíz siempre se celebraron la primera semana de septiembre “porque en esa fecha llovía y se podían sembrar los granos.
Sin embargo, el hombre de 41 años, es consiente de que el Paseo del Chagra ha cambiado con los años. “Antes desfilaban solo los chagras trabajadores y ahora también salen los hacendados”.
Héctor Jácome, alcalde de Rumiñahui, señaló que esta fue la decimoséptima vez que se celebra el tradicional desfile. “El crecimiento de la ciudad hace que se vayan perdiendo las tradiciones ganaderas. Por ello, esta fiesta es una oportunidad para retomar lo que tiene que ver con el campo y a veces está olvidado”.
Las fiestas que se celebraron durante 14 días terminan mañana. Hoy es la doma de potros y la tercera corrida de toros populares en la plaza de toros, a las 09:00. Mañana será la cuarta y última corrida de toros, a las 14:30.
El comercio también fue un punto central de la celebración. Cerca de la plaza central, la venta de hornado, llapingachos ambateños, caldo de menudo, caldo de gallina... sedujo a los visitantes.
María Jiménez vendió USD 30 en solo tres horas. “Estas fiestas atraen al turismo y nos ayudan a promocionar nuestras costumbres”, dijo la comerciante. Asimismo, Luis Benítez aprovechó para vender sombreros de chagra. Los precios oscilaban entre los USD 6 y los USD 30.
Los más pequeños de las familias también montaron a caballo. Ese fue el caso de Frankling Cevallos, de cinco años. Él fue uno de los más aplaudidos por los asistentes. El pequeño saludaba con una mano a la gente y con la otra tomaba las riendas de una yegua para conducirla por el desfile.
Ayer también se realizó el Concurso Nacional de Lazo.
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