La Federación Ecuestre Internacional (FEI) procedió este fin de semana a un control sistemático de los caballos que participan en las pruebas del concurso de saltos internacional (CSI) de Chantilly (Francia), buscando posibles productos prohibidos en sus piernas.
Esta vigilancia está relacionada con los controles antidopaje positivos de cinco animales en los Juegos Olímpicos, cuatro de ellos por capsaicina, un analgésico utilizado en pomada o loción y que figura en la lista de medicamentos prohibidos de la clase A.
"Hicimos a la vez un control con un termógrafo y un examen clínico", declaró a la AFP la delegada de la FEI, que formó parte del equipo de veterinarios destinados al lugar por la Federación Internacional.
No hay comentarios:
Publicar un comentario